La Voz de GAlicia

El fraude a los seguros alcanza en Galicia los 120 millones

La patronal detecta cada año 29.000 casos de engaño y descubre grupos organizados que simulan ser víctimas de accidentes

Los intentos de engaño a los seguros van a más. Los casos se elevan a 29.000 en Galicia y el importe que se intenta defraudar cada año a las compañías asciende a 120 millones, la décima parte de lo que mueven las estafas en España. Son datos del departamento de estudios de Unespa, la patronal del seguro, dirigido por Miguel Ángel Vázquez.

El responsable de este departamento señala que han detectado grupos organizados que fingen accidentes por toda España con el fin de cobrar el seguro. Pero las compañías están aumentando las inspecciones y ponen a trabajar a sus detectives para descubrir estos intentos de engaño que «han ido a más con la crisis».

Los gallegos tienen el dudoso privilegio de ser los terceros más mentiroso con las compañías. El ránking de troleros lo encabezan los ciudadanos de Baleares, con 1.148 casos de engaños por cada cien mil habitantes. Les siguen los madrileños, con 1.118 y luego Galicia, con 1.051. Los más honrados, según la patronal, son los vascos, y los ciudadanos de Ceuta y Melilla.

Aunque en los tribunales están a la orden del día los juicios por accidentes falsos, hay otro tipo de pillerías que los superan. Mientras en Galicia hay 7.700 siniestros de vehículos simulados al año, se producen 17.000 falsos robos en los domicilios. Otros 4.700 casos de engaños se originan en los ámbitos de los seguros de vida y mutuas de salud.

Adolfo Campos, director del Instituto Atlántico del Seguro, señala que es cada vez más frecuente intentar timar a la compañía con los equipos electrónicos. «Muchos afirman que le han robado la tablet y curiosamente el perfil del supuesto ladrón se repite: moreno, cazadora y pantalón vaquero». Pero las cosas han dejado de ser tan fáciles. «Ahora las aseguradoras exigimos un parte de denuncia ante la Policía Nacional. No basta que sea ante la Local. Y cuando se presenta la denuncia, los agentes suelen realizar una interrogatorio pormenorizado». En estas pesquisas es fácil detectar la mentira.

Según Miguel Ángel Vázquez, autor de la memoria social del sector asegurador, «cada vez más los ciudadanos desaprueban estos comportamientos. Antes alguien podía llegar al bar y presumir de haber engañado al seguro y casi le aplaudían. Hoy lo más normal es que te echen una reprimenda».

Y es que el fraude tiene un coste en las primas. «Se repercute en el precio medio del seguro en 30 euros», señala Vázquez, que intervino en el Círculo de Empresarios de Vigo.

En las jornadas también se abordó la alta siniestralidad en la provincia de Pontevedra, donde se produce un accidente cada 30 minutos, y el aumento de las indemnizaciones de tráfico que se traducirán en un incremento de las primas en el 2016.