jueves, 28 de enero de 2016

La Voz de Galicia

Tráfico identifica más de 2.000 kilómetros de riesgo en las carreteras de Galicia

Son tramos de carreteras convencionales, con vías de un solo carril por sentido y sin medianas, con gran accidentalidad y excesos de velocidad

Son los 125 tramos más peligrosos de Galicia. Todos están situados en el extenso y complejo entramado de carreteras convencionales de la comunidad formado por vías de un solo carril por sentido y sin mediana de separación en las que se producen la mayoría de los accidentes graves. El 88 % de las muertes registradas el año pasado en accidentes de tráfico en Galicia tuvieron como escenario una de esas carreteras en las que un exceso de velocidad o una distracción pueden terminar en una salida de vía o en un choque frontal.
Desde el año pasado la Dirección General de Tráfico se ha comprometido a identificar y localizar esos tramos de máximo riesgo, y a actualizar la información de manera periódica. Así trata de advertir de los puntos más peligrosos de la red de carreteras y al mismo tiempo señaliza los lugares en los que se incrementará la vigilancia por parte de las patrullas de la Guardia Civil de Tráfico. En esos tramos los controles se centrarán fundamentalmente en los excesos de velocidad con la colocación de radares móviles que estarán advertidos previamente, según el compromiso adquirido por la propia DGT.
La elevada siniestralidad es el principal criterio que Tráfico tiene en cuenta para valorar la inclusión de nuevos tramos entre los más peligrosos. El listado de carreteras negras se nutre de puntos en los que se han registrado accidentes graves, con muertos y heridos de consideración, en los que la velocidad ha sido un factor determinante; de los tramos en los que se han detectado frecuentes infracciones por excesos de velocidad, y también de las zonas señaladas por las patrullas de la Guardia Civil de Tráfico por su peligrosidad.
En la última actualización de carreteras de riesgo, la DGT ha localizado en Galicia hasta 2.144 kilómetros de especial peligrosidad en los 125 tramos de carreteras convencionales identificados por su máximo riesgo. En el conjunto de España hay cerca de 25.000 kilómetros conflictivos en ese mismo tipo de vías.
Vigilancia integral
En las carreteras de máxima peligrosidad la Guardia Civil de Tráfico está aplicando ya el denominado plan integral de vigilancia, que consiste en que el conductor parado por haber cometido una infracción por exceso de velocidad es sometido también a pruebas de alcoholemia y de drogas, al tiempo que se le revisa la documentación para saber si está en regla el permiso de conducir, si el seguro está vigente y si el coche ha pasado la ITV. Este plan surge del convencimiento de que la mayoría de los conductores considerados de riesgo son multiinfractores.
Tráfico pretende que los tramos de riesgo sean también incorporados a las bases de datos de los navegadores de los vehículos para advertir a los automovilistas de su localización, de la misma forma que sucede actualmente con los radares fijos.

Faro de Vigo

Alertan de riesgos de atropello en el entorno del colegio de Vincios

La dirección ha restringido el acceso de vehículos de padres al recinto y el problema se traslada ahora al exterior, sin aceras ni aparcamiento



Los 170 alumnos y 18 profesores del colegio Serra de Vincios se enfrentan cada día a los peligros del caos de tráfico que se genera en las inmediaciones del centro en torno a las 9.00 de la mañana y a las 14.00 de la tarde. Los riesgos de atropello coinciden con los momentos de entrada y salida y se ven acentuados por dos factores, según denuncian numerosos padres. Por un lado, la dirección restringe desde este lunes el acceso rodado a las familias al recinto escolar y, por otro, el entorno carece de aceras y aparcamiento para dejar y recoger a los niños con seguridad.
Hasta esta semana los progenitores podían entrar en el estacionamiento de la escuela, pero era dentro donde se generaban los mismos problemas. Así que el consello escolar aprobó por unanimidad impedir que los coches de las familias rebasasen el portal del recinto a primera hora y al finalizar la jornada. El director, Miguel González Barreira, explicó ayer que la medida se ha tomado para garantizar la seguridad en la parcela que ocupa el colegio, de 10.000 metros cuadrados.
Consciente de que los riesgos se repetirían en el exterior, el equipo directivo notificó al Concello la situación e incluso se reunió con el alcalde el pasado día 18 para exigir medidas para reducirlos. Entre ellas, la presencia de la Policía Local en hora punta.
Hace años que el centro reclama al Ayuntamiento obras como la dotación de un cierre por control remoto del portal y de un timbre. Al carecer de estos mecanismos, el recinto permanece abierto toda la mañana, dado que desde el edificio no se ve la entrada al recinto. "Pode entrar calquera persoa ou animal solto ou mesmo pode marchar calquera neno a pesares da nosa vixilancia", denuncia el director.
Mientras ningún gobierno municipal se ha decidido a cumplir con las reivindicaciones, los padres se quejan. "Justifican el cierre por seguridad pero están empeorando la situación. Ahora los autobuses y profesores transitan por el medio de los niños dentro del recinto escolar a la vez que fuera circulan vehículos y peatones por una carretera sin aceras. El único aparcamiento está a 300 metros, por lo que nos obligan a andar por un trayecto más largo y con el mismo peligro", señalan. "Todos estamos de acuerdo en que el centro tiene que permanecer cerrado, pero lo lógico sería realizar las obras necesarias en verano y empezar el próximo curso en condiciones", apuntan.

martes, 26 de enero de 2016

Diario Juridico


Reforma del baremo de autos

La Comisión de Expertos para la Reforma del Baremo de indemnizaciones por accidente de tráfico donde están presentadas las compañías de seguros, las asociaciones de víctimas, la Fiscalía, la Universidad y la Abogacía presentó el pasado 22/05/14 a la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones su propuesta definitiva.

Pese a que cabe indicar que aún está pendiente de ser aprobado, sí que podemos adelantar algunas de las grandes novedades que busca instaurar a fin de que se indemnice lo más justamente posible a la víctimas en accidentes de tráfico, acercándose un poco más a las normativas que rigen actualmente en Europa.
En primer lugar éste nuevo baremo supondrá un aumento medio de las indemnizaciones cifrado entre un 10% y un 15%, debido especialmente a la revisión al alza de las cuantías que perciben los lesionados graves y las familias o perjudicados de los fallecidos, en detrimento de las lesiones menores, que en general se mantienen.
También se les reconocerá el perjuicio económico a las amas de casa, para las que se prevé al menos el Salario Mínimo Interprofesional, pudiendo llegar a recibir un 10% más por cada persona dependiente de ellas y se dará un valor económico a las víctimas que no se habían incorporado al mercado laboral, para las que se fija 1,5 veces el SMI, aunque podrían recibir un 20% más si estaban culminando su formación.
Se regularán los gastos futuros de los grandes lesionados para ciertas secuelas ya que en el baremo actual, sólo se cubren gastos hasta el alta o la estabilización de las secuelas mientras que la propuesta establece que se seguirá ayudando por ejemplo, para la compra de sillas de ruedas, prótesis o en la rehabilitación, intentando en cierto modo beneficiar a aquellas personas que parecen lesiones de por vida tras sufrir un accidente (En la actualidad, la indemnización máxima en un caso extremo de gran lesionado puede llegar a 1.300.000 euros, pero con el nuevo baremo propuesto esa cuantía podría llegar hasta los 3 millones en el caso de que la víctima fuera una persona joven y sus lesiones muy graves como la tetraplejia).
En el nuevo baremo también se diferencia entre daño moral y daño patrimonial a fin de reconocer el derecho a la indemnización del lucro cesante, creándose unas tablas generales para cuantificar el daño patrimonial en cada caso además de intentar mitigar el perjuicio económico cuando la víctima del accidente está de baja, cubriendo todos los ingresos dejados de percibir siempre que se demuestre la pérdida.
Además, también se recogen cinco categorías autónomas de perjudicados en caso de fallecimiento: el cónyuge viudo, los ascendientes, los descendientes, los hermanos y los allegados, teniendo la condición de perjudicado quien está incluido en alguna de dichas categorías (salvo que concurran circunstancias que supongan la inexistencia del perjuicio a resarcir) si bien se considerará que igualmente tiene la condición de perjudicado quien, de hecho y de forma continuada, ejerce las funciones que por incumplimiento o inexistencia no ejerce la persona perteneciente a una categoría concreta o asume su posición”. De esta forma, se incluyen compensaciones para los nietos a cargo de los abuelos que fallezcan en siniestros de tráfico, para parejas de hecho y familiares de segundo o tercer grado, suponiendo el presente punto un gran avance.
Por último han procurado definir el famoso latigazo cervical a fin de intentar frenar los problemas actuales a la hora de objetivarlo y lo define como “traumatismos menores de la columna vertebral”, intentando que en el momento en que sea diagnosticado en base a la manifestación del lesionado sobre la existencia de “dolor”, sin que sea “susceptibles de verificación mediante pruebas médicas complementarias”, se indemnizarán como lesiones temporales, siempre que la naturaleza del hecho lesivo pueda producir el daño de acuerdo con los criterios de causalidad genérica siguientes:
1)“De exclusión”, que consiste en que no medie otra causa que justifique totalmente la patología”.
2)“Cronológico”, que consiste en que la sintomatología aparezca en tiempo médicamente explicable, y en particular cuando se manifiesten dentro de las 72 horas posteriores al accidente o que el lesionado haya sido objeto de atención médica.
3) “Topográfico, que consiste en que haya una relación entre la zona corporal afectada por el accidente y la lesión sufrida, salvo que una explicación patogénica justifique lo contrario.
4) “De intensidad”, que consiste en la adecuación biomecánica entre la lesión sufrida y el mecanismo de su producción, teniendo en cuenta la intensidad del accidente y las demás variables que afectan a la probabilidad de su existencia.
Asimismo, se establece que “la secuela que, excepcionalmente, derive de un traumatismo cervical menor se indemniza solo si un informe médico concluyente acredita su existencia tras el período de lesión temporal”, por lo que se pretende de ese modo acotar al máximo la subjetividad y intentar.
Cabe mencionar, que no ha habido consenso en la redacción del latigazo cervical, en la valoración de las secuelas psiquiátricas y de daño cerebral ni en las indemnizaciones a través de rentas vitalicias.

La Voz de Galicia

Los fotorrojos gallegos siguen multando a pesar del fallo del Supremo

Lugo y A Coruña estudiarán la sentencia y Santiago dice que no está afectada

Un fotorrojo lo sancionó en San Sebastián. Recurrió hasta las últimas consecuencias y en noviembre, el Tribunal Supremo le dio la razón. El sistema fotográfico que controla si los vehículos rebasan un semáforo con el disco en rojo no estaba sujeto a control metrológico y por eso rechazaba que las imágenes tengan valor probatorio. El Ayuntamiento donostiarra, tras conocerse el fallo, decidió retirar los dispositivos de sus calles.
Los que siguen en funcionamiento son la inmensa mayoría de los fotorrojos que operan en Galicia. La ciudad que más recurre a este sistema para vigilar a los infractores es Santiago, donde funcionan cuatro dispositivos: el primero se instaló hace tres años en la avenida de Lugo y desde el pasado septiembre funcionan también en Amor Ruibal, Romero Donallo y la plaza de España. El año pasado registraron 3.643 infracciones. El Concello afirma que no están afectados por el fallo del Supremo porque su sistema es diferente al de San Sebastián: los fotorrojos hacen siete fotografías y de todas ellas debe de extraerse que el vehículo pasó cuando el semáforo ya estaba en rojo. Además, un policía se encarga de revisar las imágenes y validar que la conducta era sancionable.
También en Lugo hay fotorrojo. El gobierno ha encargado un estudio al servicio jurídico del Concello para ver en qué medida afecta la sentencia del Supremo y, de momento, sigue operativo. La instalación de este sistema de control de tráfico fue consecuencia en su día de los graves accidentes que se producían en el tramo de la Ronda da Muralla comprendido entre las puertas de Bispo Odoario y O Carme, En su momento, cuando se conoció la resolución del alto Tribunal, el equipo de la socialista Lara Méndez, señaló: «O fotorroxo da Ronda da Muralla seguirá activo. A día de hoxe, non existe ningunha normativa legal que obrigue a que estes dispositivos pasen un control metrolóxico (porque non miden, senón que toman imaxes), nin, en consecuencia, está establecido protocolo algún para facelo, algo que, en calquera caso, debería ser definido a nivel estatal».
Vilagarcía tiene instalados tres fotorrojos en la ciudad. Desde que se colocaron en el 2010 hasta mediados del 2015 interpusieron 11.123 multas. En O Grove había también un polémica con un semáforo que se ponía rojo cuando se excedía la velocidad y multaba. En poco más de un año interpuso 6.920 sanciones. Ahora está apagado porque el actual grupo de gobierno (PSOE) está en contra de ese sistema y porque muchos conductores están interponiendo recursos ya que al parecer hay juzgados que no los admiten como prueba.
En Carballo han puesto un tiempo cámaras en un par de semáforos, pero no con fines sancionadores. Tienen un objetivo meramente informativo, estadístico y disuasorio.
También A Coruña ha optado por la instalación de fotorrojos para disuadir a los conductores de saltarse el semáforo en rojo. Aunque todavía no han entrado en funcionamiento, los dispositivos están ya ubicados en la plaza de Ourense, en Linares Rivas con Marcial del Adalid, en la avenida de Finisterre con Alfredo Vicenti y en Juan Flórez con la calle Nicaragua. La decisión de la instalación de fotorrojos en A Coruña correspondió al anterior ejecutivo. El actual gobierno municipal confirmó ayer que seguirá el mismo camino que el de Lugo: estudiará la sentencia emitida por el Tribunal Supremo y tomarán una decisión sobre el asunto.
Con las aportaciones de R. Martínez. Enrique G. Souto, Susana Luaña, X. Ameixeiras y E. Eiroa

Los magistrados mostraban disparidad de opiniones sobre las sanciones

Las salas de lo contencioso han venido pronunciándose de manera dispar sobre las multas impuestas por el sistema de fotorrojos. Uno de los últimos ha sido el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Ourense, que ha ordenado al Concello de o Grove retirar una multa a uno de los conductores que se saltó un semáforo con el sistema de fotorrojo. El sancionado alegó que el aparato no fue sometido al control metrológico y el Concello grovense respondió que no hacía falta, porque la máquina no utiliza un radar, sino un sistema de captación de imagen. Es decir, el infractor fue multado no por ir a una velocidad excesiva, sino por saltarse el semáforo en rojo.
Aunque el juez reconoce en su fallo que en esta materia hay disparidad de opiniones, optó por dar la razón al conductor argumentando que el semáforo en cuestión no está en un cruce de caminos y que realiza una medición de velocidad del vehículo y solo enciende la luz roja si se aproxima demasiado deprisa, por lo que la velocidad es un factor clave y debería estar sometido a la metrología.
En el sentido contrario se pronunció un juez de Lugo hace unos años. Una mujer fue sancionada por el fotorrojo ubicado en la Ronda da Muralla y acudió al Contencioso para evitar la sanción. El titular del juzgado, sin embargo, optó por rechazar las alegaciones de la conductora, que argumentó que las cámaras estaban ocultas y que no existía acreditación de su buen funcionamiento, así como que se saltó es semáforo ante el paso de una ambulancia -motivo por el que no se sanciona que alguien sobrepase el disco rojo-.
Solo capta instantáneas
En su día, el juez afirmó que «deben rexeitarse as alegacións da actora, en primeiro lugar porque o instrumento de gravación de imaxe no momento en que o semáforo está en posición vermella non ten a mesma natureza de medicións que aqueles que reflicten captación de datos coma medición de velocidade, ruído ou substancias, de xeito que este se limita á captación dunha instantánea, co obxecto, no seu caso, de detectar posibles infraccións» y añadió que en el expediente hay numerosas instantáneas en las que se ve el vehículo rebasando la línea de parada con el semáforo en rojo, «constando claramente a luz do semáforo e a identificación da matrícula, polo que a obtención da proba de cargo non deixa lugar a dúbidas da infracción».

Faro de Vigo

Los radares fijos multan a 800 conductores al día en Galicia, el doble que hace un año

Detrás del incremento están la instalación de más cinemómetros y de sistemas que distinguen el tipo de vehículo



Pisar el acelerador más de la cuenta, viajar sin cinturón de seguridad, dar positivo en alcohol o drogas, hablar por teléfono móvil o escribir un mensaje al volante. Son las infracciones más frecuentes cometidas en las carreteras gallegas, donde el año pasado fueron sancionados 1.300 cada día por infringir las normas de tráfico. Un balance que supone un aumento del 40% de las denuncias interpuestas el ejercicio anterior por los radares de la DGT, las patrullas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y los agentes de la Policía Local. Detrás de este incremento están las infracciones de velocidad detectadas por los cinemómetros fijos instalados en la red viaria de la comunidad. De hecho las sanciones por sobrepasar los límites de velocidad son las únicas que aumentan en el conjunto de las denuncias tramitadas el año pasado por Tráfico en Galicia. Hasta un total de 264.694 gallegos fueron interceptados por los radares fijos entre enero y noviembre de 2015, último mes del que la DGT tiene datos disponibles, lo que supone una media de 792 cada día. Unos datos que representan más del doble que los 126.162 expedientados en todo 2014 -una media de 345 al día-.
Detrás de este aumento está la mejora de la vigilancia en la red viaria gallega, ya que la tecnología ha permitido la implantación de nuevos tipos de radares más efectivos así como su ubicación en carreteras donde hace pocos años era imposible su instalación. El año pasado se instalaron tres nuevos cinemómetros de tramo (en la AG-55 a su paso por Arteixo, en la A-8, a su paso por O Fiouco (Lugo) y en la AG-64, en la bajada de As Pontes a Ferrol) y un sistema que lee las matrículas para saber el límite de velocidad de cada tipo de vehículo y distinguir si se trata de un turismo, un camión, una furgoneta o un autobús. En la actualidad, Galicia cuenta con una treintena de radares que se van alternando en las más de 60 cabinas fijas instaladas en los más de 17.000 kilómetros de la red viaria de la comunidad.
Estos nuevos sistemas pasarán este año factura al bolsillo de los conductores en Galicia, que batirán el récord de multas por sobrepasar los límites de velocidad. Más de 264.000 interceptados por los radares fijos en la red viaria gallega, una cifra muy superior a los 126.0162 sorprendidos en todo 2014, los apenas 103.000 de 2013, los más de 125.000 de 2012 o los más de 119.697 de 2011.
Pontevedra fue la provincia gallega con más conductores sorprendidos por los radares fijos en los primeros once meses del año pasado: más de 108.000 -el 41% del total en la comunidad-. Le siguen en la lista A Coruña, con un total de 86.326 (el 32,6%), Lugo, con casi 54.500 y Ourense con más de 15.500.
"Fines recaudatorios"
Para el presidente de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo, este aumento se debe a que Tráfico "usa las multas con fines recaudatorios". "No tiene explicación que bajen las denuncias en todos los conceptos pero que en cambio se hayan disparado las de los radares fijos", reflexiona Arnaldo, para quien este balance "es un fracaso desde el punto de vista de la seguridad vial, ya que cada vez se tendrían que poner menos multas"
Para la DGT, los radares disuaden a los temerarios al volante y no tienen un afán recaudatorio. Tráfico echa mano de las estadísticas de accidentalidad de los últimos años para analizar el descenso en más del 60% de los fallecidos en las carreteras gallegas. Detrás de este balance, según apuntaron ya el año pasado desde la Jefatura de Tráfico de A Coruña, hay varios factores: el plan de instalación de radares fijos iniciado en 2005, el permiso por puntos, la modificación del procedimiento sancionador o la reforma del Código Penal.
La mayoría de los radares fijos están en las autopistas y autovías. Los primeros se establecieron en este tipo de vías porque en ella hay acometidas eléctricas y la instalación es más factible, pero fundamentalmente para ir consiguiendo una bajada de las velocidades medias. Paulatinamente se han instalado en otro tipos de vías en las que hace pocos años no era posible por las dificultades técnicas.

lunes, 25 de enero de 2016

La Voz de Galicia

El Supremo tumba el semáforo fotorrojo

En Galicia existen cámaras operativas en Santiago y Lugo, y en A Coruña todavía no se han estrenado

El llamado fotorrojo, sistema que fotografía a los vehículos que se saltan un semáforo, se ha convertido en aliado de los ayuntamientos para denunciar y multar a miles de conductores. En Galicia el sistema funciona en Lugo y Santiago, mientras que en A Coruña existen pero no han llegado a estrenarse. Sin embargo, las pocas garantías que ofrece el mecanismo que entra en marcha justo cuando la luz pasa de ámbar a rojo -algunos ayuntamientos llegaron a multar en amarillo- ha sido una y otra vez rechazada por jueces y magistrados.
Desde noviembre su nula validez como prueba forma parte de la jurisprudencia del Tribunal Supremo. La Sala Tercera de lo Contencioso-Administrativo del alto tribunal respaldó la sentencia dictada por un juzgado que anulaba la sanción impuesta por el Ayuntamiento de San Sebastián contra un conductor que rebasó un semáforo en rojo -lo que conlleva la retirada de cuatro puntos del carné y una sanción económica por parte del consistorio que ronda los 200 euros-. Los magistrados consideran acertado el razonamiento ofrecido por el juez de instancia sobre que la prueba de la fotografía no es válida por «no estar el dispositivo sometido a control metrológico», algo que sí ocurre con los radares o los etilómetros de los controles de alcoholemia.
La sentencia, recurrida por el Ayuntamiento de San Sebastián ante el Supremo, destaca que «es exigible» que el fotorrojo «quede sujeto a control metrológico para que sus fotos tengan valor probatorio, pues tal sistema sí hace mediciones». «En concreto opera sobre la medición de los ciclos semafóricos temporales para detectar cuándo no se ha respetado la fase roja, y está relacionado con la intensidad luminosa del semáforo», añade el fallo.
«Una cosa es la constancia del momento de la infracción -fecha y hora- y otra que la conducta, para ser ilícita, dependa del momento cronológico en que se realiza», considera el Supremo. Y es que no todos los semáforos tienen la misma duración en sus fases y el tiempo de estas no son sometidas a control.

miércoles, 20 de enero de 2016

La Voz de Galicia

Uno de cada diez conductores no se detiene cuando los peatones van a cruzar

La Voz analiza 7 pasos de cebra sin semáforo en las ciudades: 66 coches infringieron la norma

Peatones que no respetan las normas y conductores que no respetan las normas. Es el panorama diario en cualquier cruce de cualquiera de las ciudades de Galicia. Este martes, La Voz analizó el comportamiento de los que van al volante en las siete ciudades y el resultado fue que uno de cada diez vehículos no respetó la norma que obliga a ceder el paso a los viandantes en los cruces señalizados como prioritarios para el peatón. El sistema fue el mismo que se utilizó hace unos días para comprobar si los viandantes cumplen con la ley: se escogieron siete cruces, uno por cada ciudad de Galicia, y durante diez minutos se contabilizaron los vehículos que pasaban y cuántos no respetaban la señalización. En este caso se escogió un paso de peatones no regulado por semáforo.
En total, pasaron por los siete cruces 691 vehículos. De ellos, 66 no se detuvieron a pesar de que había personas cruzando o esperando para poder cruzar. En términos absolutos, el que peor resultados tuvo fue el cruce escogido en A Coruña. Por un espacio de diez minutos, pasaron 33 coches. Una docena incumplieron la obligación de detenerse. De hecho, en otro paso de peatones, en este caso regulado por semáforo, de los 69 vehículos que pasaron tres aceleraron cuando el semáforo estaba en ámbar y cuatro se lo saltaron en rojo.
Sin embargo, en términos relativos los conductores más imprudentes están en Ourense. En el cruce de la calle Valle-Inclán pasaron un total de 17 vehículos. De ellos, siete lo hicieron mal, lo que deja un balance del 41 % de conductores infractores, mientras que en A Coruña ese porcentaje cae al 36 %.
La mejor, con diferencia, fue Pontevedra. En el cruce de Cobián Roffignac con Santa Clara pasaron unos 300 vehículos entre las 13.40 y las 13.50 horas. Ninguno se saltó el paso de peatones y de hecho, también cedieron el paso a los peatones que cruzaron fuera del paso de cebra.
Tanto en Santiago como en Lugo, fueron cuatro los vehículos que no cedieron el paso. En Compostela el cruce escogido fue el del instituto Rosalía de Castro -con un semáforo que nunca se ha puesto en funcionamiento- por el que pasaron 131 vehículos, lo que deja una tasa de un 3 % de infractores. De los cuatro que no se detuvieron a pesar de estar obligados a ello, uno no paró cuando cruzaban tres peatones, que tuvieron que aguardar en medio del cruce a que el coche pasara. Otros dos coches no cedieron el paso a pesar de que el peatón ya estaba cruzando y el último no paró cuando el viandante se disponía a cruzar.
En Lugo se escogió el paso de peatones de Quiroga Ballesteros. Pasaron 68 vehículos, por lo que casi el 6 % infringieron la ley al no detenerse.
En Vigo, por su parte, de los 57 vehículos que pasaron por el cruce de la plaza de Compostela solo hubo un infractor, que siguió circulando a pesar de que había un transeúnte cruzando. Es decir, la tasa de infractores se quedó en un 1,7 %. Y en Ferrol, en la plaza de Callao, de los 85 coches que pasaron solo dos no se detuvieron para ceder el paso, dejando un 2,3 % de infractores sobre el total de conductores.
Cinco mil sanciones
En el 2014, la Dirección General de Tráfico registró 2.705 infracciones de este tipo en España entre los vehículos implicados en accidentes de tráfico, lo que supone el 5 % del total. Y los datos por comunidades autónomas de la DGT también revelan que en Galicia se pusieron unas 5.000 sanciones por no respetar los semáforos, todas ellas con la pérdida de cuatro puntos del carné de conducir para los infractores.
Por grandes municipios, el que más sanciones por no respetar los semáforos registró fue Santiago, con más de un millar en el año 2014, seguida de Vigo (unas 800), Lugo (alrededor de 700), Ourense (125) Pontevedra (50), A Coruña (unas 50) y Ferrol (alrededor de 40).

martes, 19 de enero de 2016

Lav Voz de Galicia

Los conductores gallegos engañan menos al seguro, pero con más coste

Medio millón de asegurados en la comunidad aún justifican los timos a las compañías

Los conductores gallegos son menos proclives que la media nacional a engañar al seguro para colarle reparaciones que no se corresponden con el siniestro del que se da parte, aunque, por contra, el importe medio defraudado es superior. Esta es una de las conclusiones del tercer Barómetro del Fraude en el Sector de Autos que ayer presentó la compañía Línea Directa y que señala que durante la crisis el fraude se ha más que triplicado: en el 2014 seis de cada cien siniestros en España fueron un intento de engaño, 3,5 veces más que en el 2009, y su coste se elevó un 20 % en dos años, hasta frisar los 1.200 millones de euros solo en el ramo del automóvil.
En Galicia, aunque también se ha elevado esta práctica (en el 2009 eran timos el 4,1 % de los partes), el porcentaje continúa por debajo de la media del país, situada en el 6 % del total.
Pontevedra, con un 3,94 %, está entre las diez provincias donde menos fraude se registró en los últimos dos años, según el estudio de la aseguradora, ocupando la posición número 45. Le siguen, por frecuencia de engaños, Ourense (4,21 %) en la posición 42; Lugo (4,49 %) en la 38; y A Coruña (4,82 %) en la 29.
Pese a registrar una baja frecuencia de fraude, la cuantía del mismo sí es elevada en la comunidad, ya que mientras que el importe medio en España ronda los 1.284 euros, Lugo, con 3.626 euros, casi la triplica y es la segunda provincia con una media más alta, solo superada por Huesca.
Delatores, por dinero
Otra de las conclusiones del estudio es que casi el 80 % de los conductores gallegos estaría dispuesto a denunciar a otra persona por fraude al seguro si obtuviera a cambio «un beneficio económico directo», es decir, que delatarían por dinero, frente al 73 % de la media española que admitió lo mismo.
Los hombres engañan más
Respecto al perfil del defraudador, al «tradicional» del joven varón, menor de 26 años, se le suma el de hombres de mediana edad, con estudios universitarios y que trabajan por cuenta ajena. Hay, además, otra diferencia por género, ya que los hombres defraudan más al seguro, se arrepienten menos de esas estafas y «presumen más de cometerlas». Además, sus engaños se centran más en los daños materiales, mientras que las mujeres los focalizan en los daños corporales, fingen más lesiones y simulan más gravedad de la real en las mismas. Aunque hay menos casos de fraudes corporales (el 4,5 % del total) tienen un coste unitario medio treinta veces superior al de los daños materiales.
Aunque nueve millones de españoles (de ellos, medio millón de gallegos) aún justifican engañar al seguro, la tendencia está cambiando y la intención de fraude se ha reducido a la mitad desde el anterior sondeo. Un último dato: los meses de vacaciones concentran el grueso de los timos, al igual que los lunes.

La Voz de Galicia

Las multas por cruzar mal van de 80 a 1.000 euros y se ponen en contados casos

Los concellos solo sancionan a los peatones cuando se ponen en peligro ellos o a terceros

Aunque son los conductores quienes tienen que extremar las precauciones y ser conscientes de que llevan en sus manos una máquina peligrosa, los peatones también tienen su cuota de responsabilidad en la seguridad vial. Y no siempre cumplen. La cifra de viandantes que cruzan por lugares inadecuados o que lo hacen cuando los semáforos están en rojo es alarmante, y pese a ello las sanciones que los concellos imponen a los peatones son anecdóticas. De hecho, las multas son tan excepcionales que muchas veces los propios transeúntes desconocen que su conducta puede ser penalizada. Sin embargo, así es. La Ley de Tráfico, cuya última actualización se aprobó hace solo unos meses, recoge no solo las normas de circulación que deben respetar los conductores, sino también las que deben seguir quienes se desplazan caminando, así como las sanciones con las que se castigará a quienes no cumplan.
Cruzar la calle fuera de los pasos de peatones o caminar por la calzada cuando existe zona peatonal adecuada para hacerlo puede ser penalizado con una multa de 80 euros. Esa misma cantidad pueden imponer los cuerpos de seguridad a quienes no caminen por la izquierda fuera del área urbana o a quienes circulen por autovía o autopista. Mientras, saltarse un semáforo en rojo puede tener un coste de 200 euros. Según la nueva ley, los viandantes están obligados a someterse a controles de alcoholemia o drogas si se ven implicados en un accidente o si han cometido una infracción. En este caso, si el resultado de esas pruebas es positivo, la multa puede alcanzar los mil euros, y también habrá penalización si el peatón se niega a someterse a los controles. Según los datos de la Dirección General de Tráfico, uno de cada cinco peatones atropellados durante el año 2014 había consumido alcohol.
También según los datos de la DGT, entre el 40 y el 50 % de los atropellos que se producen en Galicia son debidos a infracciones de los propios peatones, que olvidan muchas veces que son el elemento más débil en la calzada. Pese a ello, las opiniones sobre la oportunidad de las multas son encontradas. Frente a quienes apuestan por el valor pedagógico de las sanciones están quienes estiman que, sobre todo si hablamos de entornos urbanos, la prioridad de los peatones está por encima de todo lo demás. Esa filosofía prima, por ejemplo, en la ciudad de Pontevedra, multipremiada por sus trabajos de peatonalización. «Pontevedra prioriza a mobilidade peonil por riba de calquera outra. Isto supón que aquí non se puxo ningunha sanción, nin se prevé poñela», explica un portavoz de este Concello, que añade que tampoco está previsto hacer «campañas para dirixir aos peóns, dado que a cidade de Pontevedra é dos seus cidadáns, e non dos vehículos».
Daniel Mancelle, jefe de la Policía Local de este concello, opina que «os peóns obviamente teñen que respectar a norma e facer o que teñen que facer», pero a su juicio «se os condutores prestaran a debida atención e moderaran a velocidade, isto cambiaría moito. Calquera dos que levamos un coche nas mans sabemos que nos podemos atopar a unha persoa, así que mellor levante o pé do acelerador e poña a maior atención posible».
Igual que ocurre en Pontevedra, tampoco Ourense, ciudad en la que ha saltado la alarma por el elevado número de atropellos, impuso multas el año pasado a ningún peatón por cruzar de forma inadecuada. Para atajar la siniestralidad, el Concello y las Administraciones con competencias en tráfico acordaban la semana pasada reforzar la presencia de los agentes de la Policía Local en la calle y desarrollar campañas de sensibilización sobre seguridad vial.
En A Coruña se tramitaron a lo largo del 2015 un total de 70 multas a peatones, aunque solo tres de ellas se debieron a infracciones como no cruzar por el paso de peatones o atravesar con el semáforo en rojo. Las demás sanciones tuvieron que ver con la realización de actividades invasivas que ponían en peligro a las personas y la circulación. En Ferrol se tramitan denuncias en casos graves, como el reciente de una persona que no atravesó por el paso de peatones y que cuando los agentes le llamaron la atención no solo cruzó igualmente, sino que les faltó al respeto. En los últimos ejercicios en esta ciudad se ha impuesto una multa al año a peatones.
79 denuncias de Tráfico
Fuera de los cascos urbanos es Tráfico el departamento encargado de la seguridad vial. Este departamento también impulsó el pasado año en Galicia una campaña dirigida a los peatones. Desarrollada entre el 23 de febrero y el 15 de diciembre, se saldó con la entrega de 240 chalecos reflectantes a peatones vulnerables y con 79 denuncias por conductas que implicaban un riesgo para la seguridad del propio peatón y de los usuarios de los vehículos.
El 67 % de esas multas, un total de 53, tuvieron como motivo transitar por la calzada o el arcén durante la noche sin utilizar prendas de alta visibilidad. Mientras, el 17,72 % de las personas multadas en esta campaña de la Dirección General de Tráfico lo fueron por caminar por autopistas o autovías sin causa justificada. En total se impusieron 14 multas por este motivo.

Ninguno de los 15 peatones muertos en carretera llevaba ropa reflectante

Según el balance que el lunes hizo público la Dirección General de Tráfico, referido al año 2015 y a las carreteras de su competencia, ninguno de los 15 peatones que murieron atropellados en ese período llevaban prendas de alta visibilidad. De ahí que Tráfico insista en la necesidad de que se utilicen este tipo de ropas y de ahí también que la propia DGT reparta chalecos reflectantes entre los colectivos de mayor riesgo. En todo caso, el balance del 2015 es un poco mejor que el del ejercicio anterior. Así, se produjeron, en los viales de la demarcación de Tráfico, 167 atropellos, 42 menos que en el 2014; y las 15 muertes de peatones fueron también cuatro menos. Los viandantes que perdieron su vida sobre la carretera tenían una edad media de 64 años. El 72 % fueron atropellados a menos de 10 kilómetros de su casa, y el 53 % de noche.

lunes, 18 de enero de 2016

La Voz de Galicia


Los peatones incumplen las normas de manera reiterada al cruzar las calles

Una mujer de Ourense y un hombre de Verín murieron ayer a causa de atropellos

Catorce en menos de un mes. Es el balance de la ola de atropellos que se está produciendo en Ourense y que ha puesto a las autoridades en guardia. Ayer mismo se conocía la muerte de una mujer de 62 años en el hospital de Ourense tras estar durante casi un mes en coma. La víctima había sido atropellada por una moto el pasado 21 de diciembre en la avenida de la Saínza de la capital ourensana. No fue la única. Verín sufrió ayer el primer atropello mortal del año. Fue en el casco urbano, a la altura de la avenida de Sousas, y a mediodía. Por causas que todavía se investigan, un vehículo alcanzó a un hombre mayor que sufrió graves lesiones que, tras ser ingresado en el hospital comarcal, le causaron la muerte. Según los datos estadísticos que maneja el Concello de Ourense, solo uno de cada cuatro atropellos se produce por causas imputables a los transeúntes.
La Voz analizó esta semana el comportamiento de los peatones en las siete ciudades. Durante diez minutos, se contabilizaron los viandantes que pasaban por un cruce céntrico, con bastante tráfico, paso de peatones y semáforo. Y casi la mitad de los que cruzaron la calle lo hicieron incorrectamente, ya sea porque usaron el paso de cebra pero lo hicieron cuando el semáforo estaba en rojo o porque cruzaron por la zona pero fuera del paso de peatones, en ocasiones a varios metros de distancia. En total, por los pasos de las siete ciudades cruzaron 969 peatones. De ellos, 463 lo hicieron de manera incorrecta. En algunos de los cruces el número de transeúntes que incumplieron la norma era superior a la cifra de los que respetaron la señalización. Es el caso de Vigo, con un 63 % de peatones infractores, o de Lugo, donde solo cuatro de los 170 viandantes contabilizados cruzaron con el semáforo en verde. Tampoco en Ourense se respetó la señalización: el 58 % de los que cruzaron en la rúa Progreso lo hicieron incorrectamente. La mayoría porque no utilizaron el paso de peatones.
En el otro lado de la balanza está Pontevedra. Solo el 6 % de los peatones no respetaron la señalización. En Santiago, la cifra asciende a uno de cada 4, mientras que en Ferrol es de un 17 %. En A Coruña el porcentaje de infractores ascendió al 45 %.
Encuesta del IGE
El Instituto Galego de Estatística también preguntó a los gallegos por cómo utilizaban los pasos de peatones. La encuesta de seguridad vial, correspondiente al 2013, revela que casi el 48 % dice utilizarlos siempre, mientras que hay un 1,16 % que confiesa que nunca los usa. Los hombres son los más imprudentes. El porcentaje de los que siempre cruzan por el paso de peatones es del 43 % frente al 52 % de las mujeres, que en el 0,93 % de los casos confesaron que nunca lo utilizan, mientras que ese porcentaje asciende hasta el 1,4 % entre ellos. Y a más juventud, más imprudencia. Uno de cada cinco gallegos de entre 16 y 24 años dijo que solo los utiliza a veces y solo el 44 % afirma que lo hace siempre, un porcentaje que asciende hasta el 64 % en el caso de los mayores de 65 años. Los lucenses son los que menos uso dan a los pasos de peatones. Casi el 18 % dijo que no los usaban nunca o solo a veces, un porcentaje que es de un 10 % en el caso de Vigo y Santiago, un 12 % en A Coruña y que ronda el 14 % en Ferrol, Pontevedra y Ourense.
La Dirección General de Tráfico incluye en sus estadísticas los accidentes en las vías urbanas que son de su competencia. En el 2015, en Galicia contabilizó catorce peatones fallecidos, cinco más que en el 2014, cuando hubo nueve víctimas mortales. Además, en el 2014 otros 84 viandantes tuvieron que ser hospitalizados, mientras que 246 personas sufrieron lesiones leves. En cuanto a los ciclistas, hubo seis hospitalizados y 43 heridos leves. Solo en Ferrol, desde el 2012 se han producido 90 atropellos, con un fallecido. En Ourense, en el 2014 hubo 55 atropellos con una víctima mortal.

jueves, 14 de enero de 2016

Cinco Dias


Cuatro años de cárcel por cortarse una mano para estafar a su seguro


La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Castellón ha condenado a cuatro años de prisión por un delito continuado de estafa a un hombre que se amputó la mano y fingió haber sufrido un accidente de tráfico, así como a devolver a las aseguradoras los 335.000 euros que percibió como indemnización.
Según la sentencia hecha pública hoy por el Tribunal Superior de Justicia valenciano, antes del siniestro, el condenado, un agricultor con problemas económicos para pagar su hipoteca contrató o amplió la cobertura con hasta ocho compañías de seguros contra las que luego pleiteó para percibir las indemnizaciones correspondientes.
El fallo, del que ha sido ponente el magistrado Carlos Domínguez, considera probado que el acusado, “para poder cobrar las coberturas pactadas, procedió en la madrugada del 10 de diciembre de 2007, bien solo o con la ayuda de terceros, a amputarse con un instrumento cortante su mano derecha”.
Posteriormente, tras haberse protegido la herida resultante con un torniquete que controlase la hemorragia, se dirigió, solo o acompañado, con su vehículo hacia la carretera conocida como Camino Viejo de Nules a Moncofar.
Sobre las 7.50 horas y a la altura del kilómetro 955,200, donde existía un cambio de rasante para salvar la vía férrea, provocó que el automóvil se saliera por su izquierda, dejándolo caer por un terraplén hasta quedar detenido.
Según el relato de hechos probados, “el acusado, que portaba en el interior del vehículo una barra o regla cuyas dimensiones y estructura no han sido determinados, procedió a colocar la mano que se había cortado a los pies del asiento del conductor y, de seguido, a prender fuego al vehículo valiéndose de una bolsa de gasolina que portaba a tal efecto”.
Tras ello llamó al teléfono de emergencias 112 y se recostó sobre el terraplén a la espera de la ayuda solicitada, en cuya posición estaba, “fumándose un cigarro”, cuando llegó un agente de la Policía Local de Nules y otros policías locales de Moncofar, para hacerlo posteriormente los bomberos y la Guardia Civil.
Por todo ello la Sección Primera le condena por un delito continuado de estafa a cuatro años de prisión.
Además le impone una multa de 3.000 euros y le condena a devolver a las compañías aseguradoras con las que había contratado las pólizas los 335.000 euros que percibió como indemnización por el falso accidente. EFE

Faro de Vigo

Herida grave tras sufrir una salida de vía en la A-55 en Porriño

La conductora tuvo que ser excarcelada por los bomberos, ya que quedó atrapada en el interior de su vehículo


Una mujer resultó herida grave esta mañana en una aparatosa salida de vía en Porriño. El siniestro ocurrió a la altura del kilómetro 13 de la A-55.
Hasta el lugar se trasladaron los bomberos de O Porriño para excarcelar a la conductora, que se encontraba atrapada dentro de su vehículo.

miércoles, 13 de enero de 2016

La Voz de GAlicia

Adiós a la guerra de los seguros baratos

Las compañías comienzan a subir el precio de las pólizas de los automóviles, empujadas por la mayor siniestralidad y el nuevo baremo de accidentes de tráfico


Adiós a los seguros de coche casi tirados de precio. La guerra de tarifas a la baja en la que las aseguradoras llevaban siete años inmersas, para evitar perder cuota de mercado durante la crisis, ha tocado a su fin. Así lo confirman estudios del sector realizados por diferentes comparadores, que concluyeron que entre enero y octubre del pasado año el importe medio de los seguros de coche a terceros y terceros ampliado (que concentran el 70 % de las contrataciones) experimentaron un aumento del 5,3 %, pasando de los 353 euros de enero a los 371,5 de octubre. Y la previsión es que la tendencia que comenzó en el 2014 no solo se mantenga si no que se incremente en este ejercicio, en el que el portal Kelisto estima que los precios podrían crecer otro 6 % más.
El 2014 marcó el punto de inflexión, con un repunte del 5,1 % en las tarifas, frente a la caída de prácticamente la misma cuantía (el 5 %) registrada el año anterior. ¿Qué ha provocado el cambio?
Hay dos causas principales. Una de ellas es, paradójicamente, la recuperación económica, que ha provocado un aumento de la siniestralidad (el porcentaje de la prima que se destina a los siniestros), que ha pasado del 75,2 % en el 2013 al 77,3 % en el primer semestre del 2015. Con la recuperación han aumentado las matriculaciones de vehículos y también los desplazamientos por carretera y, en consecuencia, los accidentes.
A este factor se suma otro, que es la entrada en vigor, el pasado 1 de enero, del nuevo baremo para indemnizar a las víctimas de accidentes de tráfico. El nuevo sistema de valoración que cuantifica las indemnizaciones económicas por las secuelas y los daños morales y patrimoniales que se derivan de un accidente introduce actualizaciones y cambios que, en muchos casos, pueden elevar hasta en un 50 % las cuantías, lo que se traducirá en un importante bocado a las cuentas de las aseguradoras.
La memoria económica del nuevo baremo, aprobado por ley el pasado septiembre, establece que el coste de las indemnizaciones subirá en un 8 %, lo que apunta a que las compañías acabarán trasladando el incremento, en mayor o menor medida, a sus asegurados. Desde Unespa, la patronal del sector subrayan que los precios los establecen las compañías y que es cada aseguradora quién decide qué modelo de negocio quiere, por lo que no se puede hablar de incrementos generalizados.
Evitar perder dinero
Efectivamente, las firmas no hablan abiertamente de subidas de tarifas y la repercusión de otros costes para cubrir el impacto del nuevo baremo, pero las más grandes del sector llevan tiempo deslizando el discurso de que es necesario subir precios para evitar perder dinero.
El presidente de Mapfre, Antonio Huertas, en la presentación de los resultados semestrales del 2015 calificó de «insostenible» que el sector asegurador de autos pierda dinero, por lo que instó a las compañías deficitarias a encarecer las tarifas. «El mercado tendrá que actuar, tendrá que reaccionar», sentenció.
En la misma línea de acomodar los precios a la nueva realidad está Mutua Madrileña, aunque la estrategia de la entidad presidida por Ignacio Garralda es la de absorber en lo posible el incremento de las indemnizaciones para que impacten lo mínimo en sus primas. Cosa distinta es que todas las firmas puedan hacerlo.

La nueva norma introduce otros conceptos indemnizables y acota el fraude

El nuevo baremo, que acaba de entrar en vigor, es la culminación de cuatro años de trabajo de una comisión independiente encargada de revisar y adaptar a la situación social y a los avances médicos el sistema de indemnizaciones creado en 1995.
«Funcionó muy bien durante veinte años, pero se quedó desfasado y dio lugar a un incremento de la litigiosidad, porque las víctimas consideraban que la indemnización no era justa». Así explican desde Unespa la génesis del nuevo baremo, que persigue dar soluciones extrajudiciales en la inmensa mayoría de los accidentes de tráfico.
Las compensaciones suben porque, señala la patronal del sector, se elevan a los grandes lesionados y a los familiares de los fallecidos, además de incluir nuevos conceptos indemnizables, como el gasto médico futuro (la atención que requieran lesiones estabilizadas, cambios de prótesis, etcétera) o el lucro cesante (el dinero que deja de percibir el lesionado por las secuelas del siniestro).
Otra novedad es el baremo de concurrencia de culpas (que un siniestro se produzca o agrave por tu intervención), que no se aplica nunca a los menores de 14 años. Igualmente incluyen en las indemnizaciones a las nuevas estructuras familiares (el requisito es convivir cinco años), adaptándose a la realidad social.
También pone coto al fraude de las falsas lesiones, especialmente las cervicales, que se siguen indemnizando, pero bajo mayores exigencias, como condicionantes temporales y exámenes biomecánicos.

martes, 12 de enero de 2016

Faro de Vigo

Detenido un conductor ebrio con el carné retirado y sin seguro

La Policía Local de Vigo detuvo a R.C.F., varón de 59 años por conducir ebrio y sin carné, temporalmente suspendido, un vehículo que carecía de seguro. El arrestado se produjo a raíz de un accidente en la calle García Barbón. Cuando los agentes le realizaron la prueba, dio positivo, lo que motivado al resto de faltas llevó a su detención.