Un camión se hunde en un socavón en Canceleiro
Un autobús deja un reguero de aceite en su recorrido por la ciudad y causa un accidente
La mañana de ayer se presentó muy complicada para los conductores vigueses. Un socavón en el área de Areal y el vertido de un autobús de transporte escolar a lo largo de su recorrido por varias calles de la ciudad convirtió el tráfico en una trampa de retenciones y calles cortadas durante algún tiempo.
Los problemas comenzaron con apenas unos minutos de diferencia. Sobre las nueve menos veinte, la Policía Local recibía varias llamadas de ciudadanos que avisaban de que un autobús iba dejando un reguero de aceite en la calle. Casi al mismo tiempo, un camión se hundía en un socavón en la calle Canceleiro, a la altura del número 11. En el primer caso, los bomberos se vieron obligados a intervenir en varios puntos de la vieja Carretera de Madrid, en Pizarro, Gregorio Espino, Jenaro de la Fuente y Arquitecto Palacios.
En todos los casos se trataba de manchas de aceite que en el caso de Pizarro pudo originar el coche de dos turismos, cuyos conductores aseguraron que el pavimento estaba muy resbaladizo, lo que provocó que perdieran el control de sus vehículos originándose el choque entre ambos. No hubo que lamentar heridos
El segundo incidente de la jornada se producía apenas doce minutos después del primero cuando el camión cargado se hundía en un socavón de un metro de ancho por metro y medio de largo que se originaba ante el número 11 de la calle Canceleiro. El incidente obligó a la Policía Local a desviar el tráfico hasta que una grúa logró sacar del lugar al vehículo. Al lugar se trasladaron técnicos de la empresa concesionaria del agua y de mantenimiento, que localizaron a tres metros de profundidad una tubería averiada como origen del hundimiento del suelo. La zona quedó vallada para evitar accidentes.
Por su parte, el Ayuntamiento manifestó que este tipo de incidentes están originados por 'el abandono que durante 50 años han mantenido los sucesivos gobiernos municipales' en relación al mantenimiento de las tuberías de suministro. En este sentido recuerdan en la misma nota que las humanizaciones 'persiguen renovar', incluyendo la calle afectada por el socavón.
En todos los casos se trataba de manchas de aceite que en el caso de Pizarro pudo originar el coche de dos turismos, cuyos conductores aseguraron que el pavimento estaba muy resbaladizo, lo que provocó que perdieran el control de sus vehículos originándose el choque entre ambos. No hubo que lamentar heridos
El segundo incidente de la jornada se producía apenas doce minutos después del primero cuando el camión cargado se hundía en un socavón de un metro de ancho por metro y medio de largo que se originaba ante el número 11 de la calle Canceleiro. El incidente obligó a la Policía Local a desviar el tráfico hasta que una grúa logró sacar del lugar al vehículo. Al lugar se trasladaron técnicos de la empresa concesionaria del agua y de mantenimiento, que localizaron a tres metros de profundidad una tubería averiada como origen del hundimiento del suelo. La zona quedó vallada para evitar accidentes.
Por su parte, el Ayuntamiento manifestó que este tipo de incidentes están originados por 'el abandono que durante 50 años han mantenido los sucesivos gobiernos municipales' en relación al mantenimiento de las tuberías de suministro. En este sentido recuerdan en la misma nota que las humanizaciones 'persiguen renovar', incluyendo la calle afectada por el socavón.
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